domingo, 6 de enero de 2013

En el principio







En el principio

Si he perdido la vida, el tiempo, todo        
lo que tiré, como un anillo, al agua,
si he perdido la voz en la maleza,        
me queda la palabra.

Si he sufrido la sed, el hambre, todo        
lo que era mío y resultó ser nada,
si he segado las sombras en silencio,        
me queda la palabra.

Si abrí los labios para ver el rostro        
puro y terrible de mi patria,
si abrí los labios hasta desgarrármelos,        
me queda la palabra.

2 comentarios:

  1. Después de deleitarme con palabras, música y sonidos que me han hecho soñar con el amor, con Dios, con la belleza de esas voces tan espectaculares que tenéis.Me encuentro con este macabro poema con el que has conseguido, Javier, impresionarme. Precioso.
    Y el blog: ¡Chapó!

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  2. Hola, Manolo. Gracias por tu visita, aunque creo que al macabro poema al que te refieres nos es éste, sino La desesperación de Espronceda.
    Un abrazo.

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